Por Sebastián Simonetti
Río Negro suma una nueva propuesta de deuda. En este caso, el gobernador Alberto Weretilneck planea emitir bonos por 3.000 millones de pesos con un plazo de colocación de 36 a 60 meses. Los títulos por colocar deberán pagarse entre el 2020 y 2022, cifra que deberá responder la próxima gestión provincial. Cabe destacar que esta medida se enmarca en el Presupuesto 2017, con la emisión de hasta $ 4.000 millones. Desde Hacienda, indicaron que el nuevo título tendrá de 36 meses (3 años) a 60 meses (5 años), aunque el plazo definitivo se resolverá con el interés del mercado. De la misma manera, la tasa también responderá a la oferta, con un permiso nacional de Finanzas de hasta cinco puntos por sobre la tasa Badlar (18,5 % a 19 %). Así, según esas referencias, el interés podría llegar al 24 %. Además de las altas tasas de interés, las principales críticas apuntan a un megaendeudamiento, que sólo en lo que va de este año alcanzaría los dieciséis mil millones de pesos, sumando los cuatro mil millones en emisión de letras del Tesoro, los nueve mil millones del Plan Castello y esta nueva intención de colocar bonos por tres mil millones de pesos.
En principio, la razón de ser de esta nueva toma de deuda está direccionada a solventar y refinanciar el vencimiento del crédito anterior, por una suma similar y contraída para “paliar el desajuste financiero por la disminución de la coparticipación”. Pero, también, la Provincia presenta una seria dificultad para cumplimentar el pago de los salarios y aguinaldos. En ese sentido, se especula que parte del dinero que ingrese por la puesta en juego de los bonos sea destinada a facilitar esa cuenta pendiente. En limpio, esta nueva toma de deuda será destinada para pagar deuda o para gastos corrientes; es decir, no habrá posibilidad de recuperar el dinero a ningún plazo.
Sin embargo, la oposición no tiene intenciones de allanar el camino para este empréstito. El Frente para la Victoria presentó ante la Justicia un amparo “prohibimus”, para “evitar un nuevo y brutal endeudamiento con el que Weretilneck pretende seguir hipotecando el futuro de los rionegrinos”. No obstante, desde la gestión provincial, contarían con los votos, en caso de ser necesario. Cabe recordar que los legisladores ya han acompañado otros endeudamientos, aunque de manera dividida. El último respaldo a los intereses del Gobernador fue el Plan Castello, donde incluso parte del FpV votó a favor de la medida. La salvedad es que aquella iniciativa prevé la construcción de obras de gran infraestructura, mientras que, en el caso de los últimos bonos, no está del todo claro el destino de los fondos. Y claro, otra diferencia importante es la moneda, puesto que el plan de obras es en dólares, mientras que la reciente iniciativa propone un endeudamiento en pesos.
En tanto, el Gobernador ya ha mostrado una tendencia en la toma de préstamos. El 2016 estuvo marcado por la colocación de casi 333 millones de pesos en letras del Tesoro en el mercado financiero, con vencimiento en tres tramos. Además, la Provincia cerró con un déficit de poco más de $ 3.000 millones. A pesar del beneplácito gubernamental por la tasa de interés, los principales cuestionamientos se enfocaron en el destino de gastos corrientes, como la cancelación de obligaciones del Estado provincial, sobre todo referidas a contratistas de obra pública y proveedores, y no primordialmente al de gastos de capital. Esta modalidad de administración va en concordancia con la gestión nacional, que por estos días lanzó una emisión de bonos a pagar en el alarmante plazo de 100 años. De hecho, los dardos opositores apuntan a una estrecha relación entre ambos gobiernos y a una sumisión de la Provincia, encolumnada detrás de la postura endeudatoria del presidente de la Nación, Mauricio Macri.
Así las cosas, la Provincia se encamina a un nuevo endeudamiento, ya sea con o sin el aval de la mayoría legislativa. Desde el oficialismo, por su parte, aseguran que lo hacen para costear una situación extraordinaria del año pasado, en la que perdieron ingresos por coparticipación, por lo que “se ven obligados”
a tomar deuda para cumplir con los vencimientos del crédito tomado en aquel entonces, con el objetivo de sortear la crisis. En ese sentido, desmienten que la emisión de bonos surja de la necesidad de obtener recursos de manera rápida para pagar sueldos y aguinaldos, como acusa la oposición. Quienes alzan la voz en contra denuncian que se está hipotecando el futuro de los rionegrinos y cargando la cuenta al próximo gobierno. Mientras tanto, las dificultades para cumplir en tiempo y forma están a la orden del día, y los plazos se vuelven cada vez más apremiantes. Resta ver el rol de los Legisladores, si es que efectivamente pasa por allí la decisión, o si se determina de manera unilateral desde el Ejecutivo. A fin de cuentas, ¿qué le hace una deuda más a la Provincia?
Marcelo Mango (Diputado Provincial Frente Para La Victoria)
“Están condenando a la Provincia”
El Diputado provincial del Frente para la Victoria dialogó con este medio, dejó su parecer sobre la posibilidad de un nuevo endeudamiento y afirmó que “deberían haber administrado bien para poder cumplir con los pagos”
El Diputado provincial por el Frente para la Victoria habló con este medio y dijo que “nuestra postura es la misma que cuando se discutió el presupuesto y el megaendeudamiento llamado Plan Castello. Encima, en este caso, el oficialismo no envió el proyecto de la deuda a la Legislatura. La Constitución establece claramente que cualquier nueva deuda debe ser reenviada al Parlamento y refrendada con los 2/3 de los legisladores”. En cuanto a la inclusión de la deuda en el Presupuesto, afirmó que “hay que recordar que la Provincia ya tiene una autorización por ese presupuesto que, aunque nosotros votamos en contra, se aprobó, de 4.000 millones de pesos en emisión de letras”. Y agregó: “Si esos 4.000 millones ya se emitieron y ya se gastaron, más las letras del año pasado, que son las que ahora se vencen y hay que absorber, estamos ha-blando de 9.000 millones de pesos del Plan Castello, más 4.000 millones en emisión de letras, más nuevos 3.000 millones de deuda. Serían $ 16.000 millones de deuda contraídos sólo en el 2017. Y todavía no terminamos el primer semestre del año”. Respecto del uso de los bonos, afirmó que “la emisión de nueva deuda debe tener un destino muy específico a obras de infraestructura, o en casos de emergencia climática. De lo contrario, debe usar otros mecanismos”. Y finalizó con un dardo a Nación: “La política económica del Gobierno ha sido desfinanciar a las provincias y condenarlas al endeudamiento, tal como se está endeudando al país”.
Daniela Agostino (Diputada Provincial Frente Progresista)
“Sin esta medida, la Provincia no podrá pagar sueldos y aguinaldos”
La Diputada provincial del Frente Progresista habló con La Tecla Patagonia sobre la posible toma de deuda por parte de Provincia y afirmó que “vamos a acompañar la medida porque no hay mucha opción”
En diálogo con el medio, la Diputada provincial afirmó que “en principio, los bonos están autorizados por el Presupuesto. Sin embargo, nosotros consideramos que no es oportuno emitir bonos, porque Nación también lo está haciendo, y no es un buen momento económico”. De la misma manera, Agostino se refirió a la situación de Río Negro y expresó: “Sabemos que hay un desfasaje de caja que tiene la Provincia y que, si no cuenta con eso, no se podrían pagar los sueldos y los aguinaldos. Nos pone en una situación bastante compleja”. También sostuvo: “La Provincia responsabiliza a Nación por el ingreso menor por coparticipación, cosa que no es real. Si hacemos un comparativo de mayo a mayo, está en un 34 %, que es superior a la inflación. Esta situación económica compleja no es por Nación”.
En cuanto al destino de la toma de deuda, la Legisladora del Frente Progresista reconoció: “Yo no lo sé con certeza, pero supongo que la prioridad es pagar sueldos y aguinaldos. Ese es un problema bastante más acuciante en este momento. Están con una situación de falta de disponibilidad de caja que hace que tengan que pedir para poder cumplir con los pagos”. Y sentenció: “Entiendo que, si hubiese otra alternativa, la habrían utilizado, porque este no es el mejor momento para emitir bonos. Vamos a acompañar la medida porque, cuando se trata de pagar los sueldos y aguinaldo de la gente, la verdad es que no hay mucha opción”.
Soraya Yauhar (Diputada Provincial Unión Cívica Radical)
La UCR da un voto de confianza a Nación y Provincia
La diputada provincial de la UCR, Soraya Yauhar, afirmó que “los bonos se van a utilizar para cancelar vencimiento de deuda”. Y agregó: “La situación económica de la Provincia no escapa a la situación nacional y de otras provincias. La demora en la reactivación económica genera cuellos de botella”. Y finalizó: “Confío en que el Gobierno nacional y el provincial encuentren el camino de la reactivación económica y del desarrollo productivo”.
Alejandro Palmieri (Diputado Provincial Juntos Somos Río Negro)
“Los bonos son para paliar la deuda por la caída de coparticipación”
El presidente del bloque de Juntos Somos Río Negro, Alejandro Palmieri, habló con La Tecla Patagonia y afirmó que “no tiene ningún asidero lo que están diciendo algunos diputados de la oposición. No vamos a utilizar la deuda para pagar salarios. Estos bonos vienen a cancelar, en parte, la deuda del año pasado, y refinanciar lo que resta de la misma. La garantía está en que se va a crear un fideicomiso con esta emisión para que sea destinada pura y exclusivamente a la cancelación de las letras, y no puedan ser utilizadas para ninguna otra cosa”. Asimismo, Palmieri argumentó la toma de deuda y dijo que “el porqué de los bonos viene del año pasado. Es imposible mirar este año sin tener en cuenta el 2016. La Provincia se encuentra en una situación financiera compleja, pero el problema no es económico. El año pasado, la Provincia tuvo un déficit menor a 3.000 millones de pesos, totalmente influenciado por la caída de recursos nacionales de coparticipación. El año no fue lo que se esperaba y el segundo semestre nunca llegó”. Y agregó: “Es financiero y no económico, porque el primer cuatrimestre de este año, la Provincia tuvo un superávit de $ 600 millones. Estos bonos hay que emitirlos porque están venciendo los 3.000 millones de pesos que fueron a emitir el año pasado para paliar un déficit en el que ninguna provincia fue exclusiva generadora, porque fueron fruto de falta de ingresos nacionales”. También habló sobre el aspecto legal y aseguró que “el presupuesto de la Provincia prevé, para este año, 6.400 millones de pesos para uso de crédito para financiamiento. Estos 3.000 entran en esa previsión”. |
