El Presidente recibe a los gobernadores en la Rosada para sellar un nuevo Pacto Fiscal

Si bien todavía la pandemia de coronavirus ocupa buena parte de la gestión diaria de todos los niveles del país, de a poco comienza a verse la luz al final del túnel y por ende, desde los distintos estamentos de poder ya planifican la tan mentada recuperación.

Por supuesto, no será tarea sencilla. Por este motivo, en un encuentro previsto para mañana en Casa de Gobierno, Alberto Fernández recibirá a todos los mandatarios provinciales. El único que todavía no confirmó asistencia es el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, que en las últimas semanas sostiene un conflicto con Nación por los puntos de coparticipación.

La incógnita sobre la presencia del mandamás de Ciudad de Buenos Aires radica en que el pacto fiscal contiene un punto controversial: establece un pla­zo de dos años antes de poder ac­cio­nar an­te la Cor­te Su­pre­ma o re­cla­mar por cuestiones vinculadas por la Co­par­ti­ci­pa­ción. Según trascendió, Nación está dispuesta a reducirlo a un año, pero desde la administración porteña exigirán su eliminación para estampar la firma.

De no prosperar la iniciativa de Larreta, debería cancelar la presentación judicial que hizo por la quita de recursos, hasta tanto se cumpla el tiempo pautado. El otro punto de conflicto es que el proyecto obliga a mantener la exención del impuesto sobre los ingresos brutos a las Leliqs y el Gobierno porteño se mantiene firme en no ceder en ese punto.

De esta manera, el encuentro entre el Presidente y los mandatarios provinciales está previsto para el mediodía en el Museo del Bicentenario. La importancia del nuevo acuerdo es que daría por terminado el anterior, alcanzado durante la gestión del expresidente Mauricio Macri. Cabe aclarar que este último Fernández lo suspendió apenas asumió.

El primer Pacto Fiscal data del 2017 y lo firmaron 19 gobernadores.  Uno de los aspectos clave era la rebaja del Impuesto a los Ingresos Brutos (IIBB). Luego había sido modificado a partir de la grave crisis económica de 2018 y finalmente suspendido en diciembre de 2019 con el aval del conjunto de los mandatarios provinciales.

No obstante, dicha suspensión rige hasta el 31 de diciembre de 2020, por eso Fernández buscará avanzar en un nuevo acuerdo que reemplace el anterior, antes de fin de año. Así, el objetivo del nuevo pacto fiscal será entonces el de frenar la baja de impuestos locales que obligaba el primer consenso, para evitar la caída de recaudación tanto en el ámbito provincial como municipal. 

Según fuentes gubernamentales, todos los gobernadores peronistas acompañan el proyecto, mientras el Gobierno nacional termina de cerrar la negociación con los mandatarios de la oposición, aunque son optimistas respecto de los resultados.