Segunda ola: la capital neuquina entró en "zona roja" y hay preocupación

La provincia de Neuquén tiene una nueva "mancha" roja en el mapa epidemiológico que día a día elaboran las autoridades sanitarias nacionales, que marca la gravedad de cada región respecto del avance del COVID, de acuerdo al número de contagios diarios, la disponibilidad de camas de terapia intensiva y las proyecciones. Ahora se sumó la ciudad capital. 

Ayer, en la localidad de Neuquén se confirmó un caso de la cepa de manaos, en una muestra de un hombre de 55 años que se encuentra internado en un hospital local. La información encendió las alarmas de las autoridades locales, ante el posible arribo de una de las nuevas cepas de coronavirus a la provincia, con el primer caso importado detectado. 

A ello, se suma que según el último semáforo de evaluación de riesgo epidemiológico que realiza el Ministerio de Salud de la Nación, los departamentos en rojo de Confluencia, Añelo, Zapala, Los Lagos y Ñorquín se encuentran en rojo, es decir, con "alto riesgo", mientras que Minas, Chos Malal, Pehuenches, Picún Leufú, Aluminé, Huiliches y Lácar son lugares de "riesgo medio". 

El caso de la capital es el más preocupante ya que concentra a la mayor cantidad de población y, por consiguiente, más altos números de contagios y muertes, así como también de personas que requieren ser hospitalizadas, lo que pone otra vez el foco en el sistema sanitario provincial y la posibilidad de una saturación. 

Asimismo, según el DNU presidencial firmado por Alberto Fernández el pasado fin de semana, que establece nuevas restricciones hasta el 30 de abril para todo el país, en el caso de los sitios catalogados de "alto riesgo, se recomienda a las autoridades dictar nuevas restricciones. Por lo tanto, las últimas noticias dejan la puerta abierta a medidas que limiten la circulación y algunas actividades en la capital provincial.