El escándalo que sacudió la Justicia neuquina la semana pasada sumó un nuevo capítulo. Se trata de la causa contra el juez Piedrabuena, que está siendo investigado por coaccionar a un fiscal de Delitos Sexuales. Ahora, por su propio pedido, le devolverán los dispositivos secuestrados y peritados como prueba en el jury. Además de este último suceso, el juez también enfrenta una causa penal por maltratar a un cajero de un hipermercado y deberá presentarse, además, a juicio por “mal desempeño de sus autoridades''. El secuestro de los celulares y computadoras del juez fue dispuesto por el fiscal Diego Azcárate, de la unidad de Asignación de Casos, que se encuentra a cargo de la causa contra Piedrabuena. Sin embargo, una semana después, por solicitud propia del acusado, le serán devueltos los dispositivos. Claro, no sin que antes el Poder Judicial realice una copia espejo de la información que almacenan. Piedrabuena accedió a eso, pero además facilitó los patrones y claves de sus dispositivos, con el fin de ahorrarle un paso a la fiscalía. Las sospechas indican que en el celular habrían fotos y documentos que Piedrabuena utilizó para coaccionar al fiscal de Delitos Sexuales, muchas de ellas habrían llegado a los celulares de allegados al Poder Judicial. De momento no se han encontrado pruebas ni indicios que permiten validar estas sospechas y poner a Piedrabuena en la cuerda floja. |