El radicalismo chubutense renovó autoridades en la Convención provincial tras un año y medio de demora, y la elección (que se llevó a cabo virtualmente por la pandemia de coronavirus) tuvo un principal objetivo: establecer quiénes firmarán las nuevas alianzas políticas en la provincia, de cara a las futuras elecciones.
La victoria de Miguel Ramos, un ex concejal de Trelew, posicionó al partido con una mirada fija a las alianzas ya establecidas anteriormente: es decir, la UCR de Chubut renovará sus votos de confianza en Juntos por el Cambio (o el nombre que adopte en las próximas semanas).
Lo cierto, es que dejará afuera otros destinos políticos, que habían sido instalados por la oposición a la línea oficialista de la UCR provincial. Se trata de la que embanderaba Orlando Vera, del Frach. Esa porción del radicalismo tejía un camino distinto, en búsqueda de un nuevo liderazgo. Incluso por fuera del PRO y otros partidos.
Pero la derrota de 59 a 38 votos (en el marco de supuestas “presiones” para algunos convencionales que se terminaron volcando por Ramos), opacó esa posibilidad y todo indica que próximamente la UCR votará las alianzas políticas hasta ahora vistas. La misión, según pudo saber este medio, será renovar bancas y mantener lo conseguido hasta ahora. El miedo es el “avance del kichnerismo”, afirman.
“La Convención fue exitosa en el punto de vista de la participación y aplicación de las nuevas tecnologías. Nosotros habíamos determinado hace tiempo que era importante definir este esquema de acuerdo de alianzas, y salió ampliamente votada esa opción, lo que permite al Comité Provincia a realizar los acuerdos pertinentes con otros partidos”, le explicó a este La Tecla Patagonia, la presidenta del partido en Chubut, Jacqueline Caminoa.
La Convención, varias veces fallidas por cuestiones epidemiológicas y una impugnación que hubo en el medio, logró poner en vigencia las nuevas autoridades. “Había que regularizar el partido”, considera la autoridad del radicalismo chubutense.
En tanto, el actual presidente de la Convención, resaltó una “presencia histórica de convencionales” que estuvieron presentes en el encuentro virtual, más allá de los problemas de conectividad que existe en la provincia y el esfuerzo que hicieron algunos para trasladarse a otras ciudades con mejor señal de Internet.
Ramos, que hasta ahora se mostraba con una figura menor dentro del radicalismo, lleva consigo el apoyo de figuras como el diputado nacional, Gustavo Menna y el diputado provincial Manuel Paglioroni y Damián Biss. Así, confirma la tendencia del partido al sincerar su deseo de afirmar las alianzas con el PRO y otros sectores, como el Polo Social de Chubut.
“A partir de las alianzas en 2017, el radicalismo recuperó un diputado nacional (Gustavo Menna) y recuperamos 8 intendencias que fueron importantes y ese es el crecimiento del partido a partir de estas alianzas”, consideró Ramos, en diálogo con LTP.
En tanto, el exconcejal de Trelew puntualizó en el desafío de seguir sumando legisladores propios, no solo para afianzarse en la provincia, sino para lograr que “el kirchnerismo no avance” en el Congreso.
“Tenemos un momento histórico, porque con los malos gobiernos que hemos tenido a nivel provincial y nacional, debemos tener una apuesta hacia nuestro sector”, sostuvo Ramos y agregó: “No solo está en juego los intereses de las provincias, sino a nivel nacional”, en referencia al capital político que cosecha el Frente de Todos.
VOTOS… ¿BAJO PRESIÓN?
Desde el Frach, denuncian que “hubo aprietes” para que los convencionales votaran a favor del oficialismo. Además, Orlando Vera advirtió que varios integrantes “no pudieron conectarse”.
“Los que nos apoyaron, votaron libremente. No se puede decir lo mismo para los que apoyaron a otro candidato”, desafió Vera, en referencia a los votos que recibió la opción ganadora, que encarna hoy Ramos.
Aun así, desde el Frach consideran que la derrota “los fortaleció” y le marcó los objetivos que tendrá que tener la UCR provincial, ahora bajo la nueva conducción. “Nosotros salimos fortalecidos, a pesar de todo. Esto marca que hay otra voz en el radicalismo de Chubut”, dijo Vera.
Por su parte, opinó sobre la actual conducción de la Convención radical: “Va a tener que ejercer mucho el diálogo y mejorar prácticas. Lograron la mayoría que buscaban, pero no eso no significa que puedan hacer lo que quieran. El desafío ahora es que el radicalismo ocupe lugares importantes”, apuntó. |
