La Provincia prorrogó el estado de emergencia y desastre para los productores de fruta

El Gobierno de Río Negro prorrogó el estado de emergencia y/o desastre en zonas afectadas por las heladas y la caída de granizo, en pos de brindar un apoyo para los productores que recientemente fueron afectados por eventos climáticos similares.

La semana pasada la Asociación de Productores del Alto Valle (APAV) se había reunido con la gobernadora, Arabela Carreras y le solicitaron medidas para que los chacareros puedan seguir en la actividad productiva.

Asimismo, el presidente de la Federación de Productores de Fruta de Río Negro y Neuquén, Sebastián Hernández, también había mantenido un encuentro con la mandataria rionegrina, el secretario de agricultura de la Nación, Juan José Bahillo y los ministros de producción de Río Negro y Neuquén, Carlos Banacloy y Facundo López Raggi para solicitar ayuda para los productores afectados por las heladas y el granizo. 

Con la prórroga los productores podrán continuar con los beneficios de la medida que exime, total o parcialmente según el daño registrado, del pago de impuestos inmobiliarios y automotor para los productores castigados por las heladas y el granizo.

La medida alcanza a los productores de cultivos frutihortícolas, de frutos secos, vid, uva de mesa y otros en las localidades de los departamentos Pichi Mahuida, Avellaneda, General Roca y el Cuy, por un plazo de 7 meses. La nueva declaración de emergencia, avalada por el decreto 1417, para el caso de los productores afectados por los recientes eventos de granizo y heladas, será por el plazo de 18 meses teniendo en cuenta el ciclo productivo de los cultivos y el económico-financiero de los productores.

Los productores afectados en la pasada temporada aún no han logrado tener ingresos para hacer frente a los compromisos asumidos y que los productores afectados en la actual temporada registran en muchos casos daños superiores al 80%.

Los decretos de prórroga 2021 y el que establece la nueva declaración solicitan, además, la adopción del mismo estado en el orden nacional ante la Comisión Nacional de Emergencia y Desastre Agropecuario (CNEyDA) lo que permitirá a los productores tener los beneficios establecidos en la ley nacional de emergencia agropecuaria.