13 de febrero de 2024
NEUQUÉN
Rolando Figueroa, entre un guiño a la austeridad y recursos destinados a áreas clave
La semana pasada, el Gobierno provincial anunció que redujo en $32.000 millones la planta política, lo cual permitirá que ese dinero sea destinado a Educación, Seguridad, Salud y Emergencias. La mirada de un economista al respecto
La semana pasada, el Gobierno de Neuquén, conducido por Rolando Figueroa desde el 10 de diciembre del año pasado, anunció que redujo en $32.000 millones la planta política, lo cual implica que el 90% de las estructuras operativas del Ejecutivo fueron ocupadas por personal de planta permanente, y solamente el 10% fue cubierto con funcionarios que ingresaron en la gestión actual.
Cabe destacar que ese dinero será reasignado a áreas clave de la Provincia, entre ellas Educación, Seguridad, Salud y también Emergencias.
En diálogo con La Tecla Patagonia, el economista especializado en administración financiera del sector público, Rafael Flores, consideró en relación a la decisión tomada por el Ejecutivo que conduce Figueroa: “Hay dos cuestiones a tener en cuenta. Por un lado, es un ahorro significativo $32.000 millones, se trata de un número importante en materia de reducción del gasto”.
En esa línea, el economista explicó: “Sin embargo, lo que me parece más interesante es que, según plantea el Gobierno, la manera en que se he hecho ha sido ocupando cargos con personal de planta permanente, y eso es algo que debería hacerse en todos los ejecutivos provinciales, municipales y también a nivel nacional. Es decir, que haya un servicio civil formado y que pueda ocupar una cantidad de posiciones intermedias en el aparato estatal”.
En ese sentido, Flores indicó: “Hoy por hoy eso es muy raro en la Argentina, entonces cada Gobierno que asume llega con una cantidad de cientos o miles de funcionarios para ocupar todos los cargos que se tienen que cubrir”, y agregó: “Si contáramos con personal de planta capacitado y que cumpla esas funciones, como sucede en los países desarrollados, la cantidad de cargos políticos sería muchísimo más reducida”.
Finalmente, el economista sentenció: “Lo más interesante es esa visión de priorizar a los empleados de planta permanente por sobre los cargos de la estructura política”.