23 de abril de 2024
NOTA DE GRAFICA
Las universidades públicas en alerta: la situación de las patagónicas
Acorde a lo que sucede a nivel nacional, las instituciones educativas de enseñanza superior de las provincias del sur padecen la política de ajuste de Nación. Cuánto tuvieron que recortar y cómo los impacta. La palabra de los rectores
Desde que asumió como presidente de la Nación, Javier Milei tomó la decisión de llevar adelante una fuerte política de ajuste económico con el fin de alcanzar el famoso “equilibrio fiscal”, tal como pregonan constantemente desde el Ejecutivo.
Dicha postura impulsada por el Gobierno hace mella en distintos ámbitos de la vida cotidiana: economía, salud, seguridad y también educación. En este contexto, la enseñanza superior quedó en agenda ya que debió implementar varios recortes e incluso se habla de la
posibilidad de que muchas cierren.
La Patagonia cuenta con numerosos establecimientos que hoy sufren en carne propia el desfinanciamiento de Nación.
En este marco, La Tecla Patagonia dialogó con rectores universitarios de la región para conocer cada situación en particular y las áreas donde vienen aplicando los recortes, además de cómo afecta esto a la operatividad diaria y a las ofertas académicas que brindan estas instituciones.
La palabra de Beatriz Gentile, de la Universidad Nacional del Comahue; Anselmo Torres, de la Universidad Nacional de Río Negro; y Lidia Blanco, de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco.
Según un informe realizado por la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), la no ampliación presupuestaria para las universidades registraría su nivel más bajo de financiamiento desde que hay registro (1997).
Dicho estudio llegó a la conclusión de que, para el 2024, el presupuesto asignado al Programa de Desarrollo de la Educación Superior es un 72% más bajo que en el 2023, y también concluyó que la caída interanual en la ejecución presupuestaria fue del 34,3%, cifra aún mayor que el promedio de la baja del gasto público (30%).
Hace algunos meses se reunieron las autoridades en representación de la UNCo, la UNRN, la Universidad Nacional de la Patagonia Austral (UNPA), la UNPSJB y la Universidad Nacional de Tierra del Fuego (UNTDF) para sentar una postura en común relacionada con la problemática que enfrentan actualmente.
La Universidad Nacional de Río Negro se vio obligada a decretar la emergencia presupuestaria debido al contexto actual. Su representación institucional votó por unanimidad la emergencia económicofinanciera hasta el 31 de diciembre del 2024, y la misma avala “procedimientos y adecuaciones presupuestarias y operativas a aplicar para afrontar los gastos de funcionamiento del ejercicio 2024” y la ejecución de “todas aquellas acciones tendientes a sensibilizar a la comunidad universitaria sobre la actual situación presupuestaria”.
La Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco, por otra parte, enfrenta algunas dificultades que también generan preocupación. Por ejemplo, programas como la Red de Simulación Clínica, el Programa de Fortalecimiento y también el de Doctorado (que solamente recibió el 50% de los fondos) actualmente se encuentran suspendidos.
Además hubo manifestaciones por parte de la UNPA, la cual emitió un comunicado en el que señaló que “el presupuesto de las universidades públicas es visto como una potencial fuente de ahorro del gasto público para satisfacer las presiones del capital financiero, lo que constituye una amenaza para el funcionamiento de las instituciones y una presión para imponer el arancelamiento”.
La UNCo también atraviesa una situación crítica. Desde la Casa de Estudios alertaron que, debido al congelamiento presupuestario del 2024 (en 2023 fue de unos $14.300 millones), el normal funcionamiento de la institución se vio seriamente afectado.
Lo concreto es que el profundo recorte que tuvieron que llevar adelante las universidades obliga a priorizar algunas cosas y tener que relegar otras tantas.
Se pagan las facturas de gas y de luz (aunque algunas generan mucha dificultad), pero no se realiza mantenimiento en otros sectores y las estructuras edilicias de las facultades -que ya vienen bastante golpeadas- continúan deteriorándose.
Otro aspecto en el cual se ve con claridad el ajuste tiene que ver con el recorte a las becas universitarias, las cuales permiten a miles de jóvenes tener una mejor formación profesional y académica.
Además las casas de estudios se vieron en la necesidad de reducir el servicio de limpieza ante la crisis presupuestaria.
Lo concreto es que el normal desarrollo de las universidades públicas, muchas de ellas catalogadas dentro de las mejores del continente, entró en un período de incertidumbre, por lo cual el futuro académico vislumbra un panorama incierto.
BEATRIZ GENTILE - RECTORA UNCo
“Lo más grave es que se dañe la estructura del sistema científico”
“Estamos en una situación crítica respecto al presupuesto y tenemos el agravante de que, a la cuota que está congelada del reconducido, en nuestro caso todavía no hemos recibido la cuota de funcionamiento, pero menos aun el incremento que fue comprometido en palabra escrita por el subsecretario. Tuvimos un aumento de las tarifas no solamente en lo que hace a los servicios de luz y de agua, sino también a la limpieza. Sin embargo, no es algo sustancial. Este año no pudimos hacer la convocatoria a becas de investigación y de extensión, lo cual era importante porque nuestros estudiantes tenían ahí la posibilidad de iniciar la carrera de Investigador, la cual hoy está suspendida”, expresó en diálogo con La Tecla Patagonia la rectora de la UNCo, Beatriz Gentile.
“No recortamos cátedras ni comisiones, es lo último que pensaríamos hacer. Priorizamos que los estudiantes puedan cursar sus materias e intentamos garantizar conectividad, porque vemos la posibilidad de que se lleven a cabo formas bimodales y también educación mediada por tecnología. Por lo pronto, estamos renegociando las tarifas con los proveedores, reducimos los servicios de limpieza y de telefonía celular y eliminamos líneas oficiales. Básicamente, vemos cómo afrontar este momento que estamos pasando”, agregó Gentile.
Y concluyó: “Hoy las tarifas son la punta del iceberg, lo más grave es que se dañe la estructura del sistema universitario científico, es decir, que el daño vaya en detrimento de la producción y del desmantelamiento de los equipos de conocimiento”.
ANSELMO TORRES - RECTOR UNRN
“No llegaríamos a fin de año si el Gobierno no cambia su postura”
“Nuestra realidad hoy es idéntica a otras universidades porque recibimos el mismo presupuesto que hubo en el 2023. Eso en términos formales. Desde el punto de vista real, en noviembre y diciembre del año pasado nos incrementaron en un 100% los gastos de funcionamiento. En enero del 2024, se decidió darnos lo mismo que un año antes. Es decir que volvimos a tener una reducción del 50% en esos gastos. Tenemos la promesa de que nos van a dar un 70% de aumento, aunque no lo vemos plasmado como una resolución. De cualquier manera, no resuelve el conflicto, porque la UNRN recibe por presupuesto $45.000.000, salvo en noviembre y diciembre del 2023 cuando recibimos $90.000.000. Hay que tener en cuenta que gran parte de los insumos de laboratorio están a precio dólar. La situación es muy compleja, y algunos ahorros que tenemos nos permiten funcionar durante algunos meses más, pero lo cierto es que no llegaríamos a fin de año si no hay un cambio”, expresó Torres en diálogo con La Tecla Patagonia.
Y declaró: “Decidimos concentrar toda la actividad de la Universidad en tres grandes funciones: la investigación, la docencia y las extensiones. Eso en el marco del presupuesto que tengamos. Por lo tanto, lo que hicimos por ahora fue recortar otras cosas como por ejemplo, actividades que tienen que ver con la formación integral de los estudiantes (cultura, deporte, etcétera)”.
“Empezamos a limitar las salidas de campo y todos los viajes que solíamos realizar a Buenos Aires, ya que no hubo una actualización de los viáticos. Los recortes de mayor impacto son las becas para los estudiantes. De alguna u otra manera, lo que se suprime va a impactar en la calidad de lo que se haga. No suspendimos ninguna cátedra”, culminó el titular de la Casa de Altos Estudios.
LIDIA BLANCO - RECTORA UNPSJB
“Hay mayor demanda de ayuda económica y eso complica”
La rectora de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco, Lidia Blanco, consideró: “Nuestra institución no está exenta de lo que sucede en las 57 de todo el país. Algo positivo es que, a pesar de que los docentes no recibieron incrementos salariales, hay un compromiso por parte de la casa de estudios en mantener las actividades administrativas y académicas en forma casi normal, porque hay una demanda de estudiantes muy importante. Hay clases presenciales, virtuales y también al aire libre, pero tenemos otros conflictos. Las extensiones se realizan dependiendo de los recursos y prácticamente no hacemos salida al territorio”, dijo a La Tecla Patagonia.
En ese sentido declaró: “Hubo que recortar el tema de las becas, hoy llega a un grupo de alumnos menor al que normalmente teníamos. Colabora para eso el hecho de que hay una mayor demanda de ayuda económica. Después está el tema de los servicios”.
En relación a la postura del Gobierno de Chubut manifestó: “Nosotros no tenemos nada que nos haga pensar que Ignacio Torres no está a favor del reclamo que estamos haciendo. Hay una declaración de la Legislatura provincial en la cual se apoya el pedido de mejora presupuestaria”.
Finalmente la rectora expresó: “El aumento del 140% que propuso el Gobierno confunde en la previa de la marcha masiva que se realizará el 23 de abril”.
Respaldo político ante los recortes presupuestarios
Todo el arco dirigente en su diversidad, salvo el sector de La Libertad Avanza, mostró su preocupación respecto a la situación crítica que atraviesan las instituciones educativas superiores en la Patagonia.
En Neuquén y en Río Negro, el apoyo de los gobernadores Figueroa y Weretilneck fue
contundente. También hubo respaldo de parte de intendentes de diferente postura ideológica y de ambas legislaturas provinciales, en las cuales se presentaron proyectos en defensa de la educación.