Nación avanza hacia la privatización de las represas del Comahue
A través de la resolución número 718/2024 que fue publicada hoy en el Boletín Oficial, el Ejecutivo que conduce Javier Milei volvió a prorrogar por un año las concesiones de las centrales hidroeléctricas ubicadas sobre los ríos Limay y Neuquén. Además, se llamará a un concurso para vender los paquetes accionarios
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El futuro de las represas hidroeléctricas ubicadas en la región patagónica de nuestro país continúa dejando tela para cortar y, en ese sentido, el Gobierno nacional dio un nuevo paso hacia la privatización de las mismas.
Es que, a través de la resolución número718/2024 que fue publicada hoy en el Boletín Oficial, el Ejecutivo que conduce Javier Milei prorrogó por un año más las concesiones de las represas hidroeléctricas del Comahue ubicadas sobre los ríos Limay y Neuquén: El Chocón-Arroyito, Cerros Colorados, Alicurá y Piedra del Águila. Además, se llamará a un concurso para vender los paquetes accionarios.
El Artículo número 6 publicado en el Boletín Oficial señala: “Dentro de los 180 días corridos siguientes a la entrada en vigencia del presente la Secretaría de Energía del Ministerio de Economía llamará a Concurso Público Nacional e Internacional, competitivo y expeditivo, con el fin de proceder a la venta del paquete accionariomayoritario o controlante de cada una de las siguientes sociedades, a saber: Alicurá S.A., Chocón S.A., Cerros Colorados S.A. y Piedra del Águila S.A.”.
Vale recordar que actualmente las represas hidroeléctricas ubicadas sobre los ríos Limay y Neuquén están en manos de las compañías Orazul Energy (Cerros Colorados), Enel (El Chocón-Arroyito), AES (Alicurá) y Central Puerto (Piedra del Águila).
Hace algunos meses, el Gobierno nacional informó también a través del Boletín Oficial la creación de cuatro sociedades anónimas que controlarán dichas represas y llevarán los nombres de los propios complejos. Las mismas estarán constituidas por el mismo directorio: Juan Carlos Doncel Jones (titular de ENARSA) como presidente y Rigoberto Mejía Aravena (también del directorio de ENARSA) como vicepresidente.
Esta decisión tomada por el Ejecutivo que conduce Javier Milei generó malestar por parte de las provincias de Neuquén y Río Negro, desde las cuales se reclama por mayor participación en el manejo de las represas, amparadas ambas jurisdicciones en el concepto establecido en la última reforma de la Constitución Nacional de que el agua que utilizan las centrales hidroeléctricas es propiedad de las provincias.