La Tecla Patagonia
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Si nos referimos a Santa Cruz, generalmente surgen dos nociones en común: la grandeza de su superficie –detrás de Buenos Aires es la segunda provincia más grande el país, con una superficie de 243 943 kilómetros cuadrados- y la gran cantidad de recursos energéticos que la componen, ya sea en materia de energías tradicionales como el petróleo o el gas, como energías alternativas que están en un período incipiente de explotación: plantas eólicas y granjas de hidrógeno.
Otro aspecto a tomar en cuenta hablar de la provincia es su población. Si bien en Santa Cruz la densidad demográfica es baja, hay cerca de un habitante por kilómetro cuadrado, la provincia pasó de 160 mil habitantes en 1991 a 190 mil en 2001 y 270 mil en 2010. Según se tiene estimado en el próximo censo, que justo está a la vuelta de la esquina, la población santacruceña podría ascender a casi 360 mil habitantes. Lo que significa un crecimiento de un tercio en la última década.
Con los números de la población ascenso, un vasto territorio y unos recursos a la que cada vez desde el resto del país y las compañías internacionales le prestan más atención, se esperaría tener una provincia en plena prosperidad. Sin embargo, y paradójicamente, hay un problema que ha persistido en el tiempo, una parte de sus habitantes vive en condiciones de hacinamiento, en concentraciones urbanas desbordadas y sin acceso a servicios públicos. Es decir, no hay espacio para crecer en la segunda provincia más grande del país.
En 2017, la Dirección de Asuntos Provinciales publicó un informe sintético de caracterización socio-productiva. En el documento se exploran diversos aspectos de la económicos y sociales provincia, como la tasas de ingreso y empleo, el PIB (Santa Cruz representa un 1,2% del total del país) y la actividad productiva. Un número que llama la atención es la cantidad de hogares con las necesidades básicas insatisfechas, que promedia en 8% de la población y en regiones como Lago Argentino y Deseado supera el 10%.
Y es específicamente en Lago Argentino, en el municipio de El Chaltén, donde la problemática habitacional, presente en localidades similares de la provincia, se desató con agresividad. El 28 de abril pasado, tras 5 días de toma de la única cancha de fútbol del municipio por parte de 10 familias, de 300, que reclaman mejores condiciones habitacionales, el Concejo Deliberante decidió declarar la crisis habitacional y por 3 años darle prioridad a políticas públicas que resuelvan la situación.
Lo sucedido de El Chaltén es solo la punta de lanza de un problema que llega a niveles estructurales en Santa Cruz.
Ricardo Sánchez- Concejal de Encuentro Vecinal de El Chaltén
“No es solamente un problema de tierras, también de alquileres, de acceso a cualquier tipo de vivienda digna”
La Tecla Patagonia dialogó con el concejal Encuentro Vecinal de El Chaltén, Ricardo Sánchez, quien expresó que la situación que se está viviendo en la localidad “es algo que lleva muchos años, se viene arrastrando desde la época de la comisión de fomento. Hay expedientes de título de tierra que tienen más de 15 años”.
El edil explicó que desde su partido presentaron hace dos años un proyecto de crisis habitacional ya que “son cosas que desde la oposición veníamos viendo que eran necesarias implementar” pero que “lamentablemente la discusión fue quedando y ahora con este emergente se entendió que había que hablar del tema”.
“No es solamente un problema de tierras, también de alquileres, de acceso a cualquier tipo de vivienda digna”, detalló Sánchez y agregó: “Es un tema que realmente nos entristece mucho como vecinos, que estas familias hayan tenido que llegar a esta medida extrema. Los que están ocupando realmente la están pasando muy mal, justo vino una racha de nieve, de frío, de lluvia y viento. Estas condiciones de acampe son realmente muy complicadas”.
El concejal señaló que el principal problema de El Chaltén es un ejido urbano demasiado reducido: “Nosotros tenemos solamente 130 hectáreas y además todo nuestro entorno es parque nacional”. Por esto para extender el territorio de la localidad se necesitaría de una ley dictada por el Congreso Nacional. “En otros lugares se compra tierra al vecino, a la estancia que está al lado, se hacen convenios y los ejidos urbanos se pueden ampliar pero en nuestro caso se complejiza el tema”, manifestó.
Sánchez expuso: “A partir de la declaración de la crisis habitacional empezamos a trabajar en ordenanzas que nos permiten medidas excepcionales para aplicar en el pueblo”. Y añadió: “En base a un trabajo presentado en el Concejo Deliberante acordamos los cinco concejales en conjunto con el intendente avanzar sobre una petición de un lugar más acotado dentro del parque nacional y que es lindero al actual municipio. También solicitamos a parques que designe un mediador representante de parte del directorio para poder hablar de una posible ampliación”.
Nadia Ricci- Diputada provincial de la UCR e integrante de la Comisión de Desarrollo Humano de la Legislatura
“Las obras de las localidades están a decisión del gobierno provincial y no de las planificaciones urbanas”
“Santa Cruz no cuenta con una planificación de desarrollo territorial relacionada justamente a las actividades productivas, económicas, culturales. El crecimiento demográfico no ha sido planeado y tampoco ha sido en todos lados igual, ha sido diferente de acuerdo a las actividades que se desarrollan como por ejemplo la minería que disparó las migraciones hacia localidades como Perito Moreno más que a otras”, expresó la diputada de la UCR, Nadia Ricci, en dialogó con La Tecla Patagonia.
En este sentido, la legisladora explicó: “El mayor déficit que tenemos es en servicios. Nunca se proyectó para dónde crecen las localidades, tenes barrios sin luz, sin gas, sin agua, sin cloacas. Lo del gas estos últimos años ha sido un problema importante. No están planificados los espacios verdes, la construcción de escuelas en función del crecimiento demográfico. Entonces, tenes un aumento de la pobreza estructural ligada a las condiciones de vida. Por ejemplo, en San Benito Río Gallegos tenes prácticamente asentamientos”.
“Santa Cruz es una provincia que coparticipa solamente el 11 % de lo que recauda y además lo hace con una ley muy vieja que nunca han querido modificar. El resto del dinero lo van otorgando a cuenta gota a cada uno de los municipios mediante aportes discrecionales o adelantos de coparticipación. Entonces el 90% de las obras de las localidades están a decisión del gobierno provincial y no de las planificaciones urbanas de cada una de las localidades”, detalló Ricci.
La diputada señaló varios ejemplos en la provincia que marcan la falta de planificación mencionada: “El Chaltén es un lugar que no se previó que estaba adentro de un parque y que no tiene lugar a dónde crecer. Pero también hay otros lugares: por ejemplo hay una comisión de fomento en Lago Posadas que las tierras pertenecen al Consejo Agrario Provincial y también hay un paraje que se llama Bajo Caracoles que queda en la ruta 40 -un lugar estratégico- que tiene un litigio porque está hecho en una tierra privada, hay un juicio de expropiación que lleva más de 30 años”.
Y agregó: “En Perito Moreno se hizo una cesión de tierras al municipio entre los años 2007-2011, la ley quedó con un error y al día de la fecha ese error no se corrigió y son tierras que podrían haberse utilizado”.
“Tampoco hay planificación en cada una de las localidades respecto a la zonificación, no existen las ordenanzas de este estilo, entonces tenes viviendas familiares al lado de un Parque Industrial”, añadió la legisladora y concluyó: “Es lamentable lo que viene pasando en Santa Cruz porque somos una provincia muy poco habitada, no llegamos a 350 mil habitantes –esperemos el censo del 18 pero yo dudo que superemos los 400 mil- y tenemos problemas estructurales muy grandes con espacios que podrían solucionarlos tranquilamente”.
Rafael Flores- Economista e investigador de la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública
“Santa Cruz no ha tenido en las últimas décadas una política de impulso de construcción de vivienda por parte del Estado”
“Santa Cruz tiene hoy dos tipos de problemas que limitan el acceso a una vivienda. El primero es compartido con el resto del país y tiene que ver con la inexistencia de créditos hipotecarios producto de la inestabilidad macro económica” expresó el economista, Rafael Flores, en dialogó con La Tecla Patagonia y agregó: “En la mayoría del mundo las viviendas se adquieren con créditos a 20 o 30 años y eso hoy en la Argentina es imposible por las condiciones en las que está nuestra moneda, la inflación y la volatilidad que existe”.
“Por otro lado, Santa Cruz no ha tenido en las últimas décadas una política de impulso de construcción de vivienda por parte del Estado o de facilitación de la construcción por parte del sector privado. No ha habido ninguna iniciativa realmente efectiva que alcance a un porcentaje de la población que permitiera que esto se resuelva. Eso marca también una falta de priorización del tema de la vivienda como problemática social cuyas consecuencias estamos pagando”, continuó el especialista.
“Estamos hablando de la segunda provincia en términos de PBI per cápita solo detrás de CABA, -incluso en algunos años ha estado por encima de la Ciudad-con una cantidad de recursos que la mayoría de las provincias miran con envidia: tiene petróleo, gas, oro, turismo, pesca; tiene una cantidad de recursos enormes para una población muy pequeña y a pesar de eso tiene niveles de pobreza y de necesidades básicas insatisfechas que no se habían visto prácticamente nunca”, explicó Flores.
Respecto a las causas, el investigador de la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública señaló: “Eso tiene que ver esencialmente con un mal manejo del gasto público, con un Estado sobredimensionado en algunas áreas que no llega a dar respuestas en otras. El Estado de Santa Cruz gasta mucho pero gasta muy mal: tiene un enorme porcentaje de participación en salarios y jubilaciones, no tiene ninguna política de empleo público medianamente coherente, el acceso a la administración pública es muy discrecional. Y ese gasto que es muy rígido deja poco espacio para que se puedan llevar adelante otras políticas públicas como por ejemplo las que se podrían implementar en materia de infraestructura”.
La Tecla Patagonia intentó comunicarse con la Subsecretaría de abordaje territorial integral pero no tuvo respuesta.