La Tecla Patagonia
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En junio de 2024, la industria manufacturera argentina experimentó una caída significativa según el reciente informe del INDEC. El Índice de Producción Industrial Manufacturero (IPI manufacturero) mostró una disminución del 20,1% en comparación con el mismo mes del año anterior. Además, el acumulado de enero a junio de 2024 presentó una caída del 16,1% respecto al mismo período en 2023, lo que refleja un deterioro profundo y sostenido en la actividad industrial del país.
El informe del INDEC destaca que todas las divisiones de la industria manufacturera presentaron caídas interanuales en junio de 2024. Entre las más afectadas se encuentran "Industrias metálicas básicas", con una baja del 31,2%, y "Maquinaria y equipo", que experimentó una disminución del 33,1%. Otros sectores como "Productos minerales no metálicos" y "Vehículos automotores, carrocerías, remolques y autopartes" también registraron caídas significativas del 35,6% y 32,2% respectivamente.
Uno de los aspectos más preocupantes es la continua caída en la producción de las industrias metálicas básicas, que registraron una baja interanual del 31,2% en junio. La industria siderúrgica, en particular, se contrajo un 36,6%, influenciada por la disminución en la demanda de sectores clave como la construcción y la industria automotriz. Este declive refleja un panorama complicado para el sector metalúrgico, esencial en la cadena de valor industrial del país.
En el sector de alimentos y bebidas, se observó una disminución interanual del 8,0% en junio, siendo la producción de galletitas, productos de panadería y pastas la más afectada con una baja del 16,6%. Este retroceso se debe a una menor demanda interna, lo que ha impactado negativamente en un sector crucial para el consumo doméstico.
La producción de maquinaria y equipo también mostró una caída pronunciada del 33,1% en junio, acumulando una disminución del 31,6% en el primer semestre del año. Este sector se vio afectado por la contracción en el mercado interno y las dificultades en el abastecimiento de componentes importados, lo que ha limitado la capacidad productiva y afectado la competitividad de las empresas.
El sector de sustancias y productos químicos registró una caída del 12,3% en junio, con impactos significativos en la elaboración de productos farmacéuticos y detergentes. La menor actividad productiva en estos subsectores se atribuye a una disminución en la demanda de medicamentos y productos de higiene, reflejando la desaceleración en el consumo interno.
En cuanto a la industria automotriz, la producción de vehículos automotores cayó un 38,3% en junio, lo que ha sido un golpe duro para el sector. Esta disminución se debe a una combinación de factores, incluyendo una menor demanda tanto interna como externa, y problemas en el suministro de componentes importados. La caída en la producción de automóviles y utilitarios afecta no solo a las terminales automotrices, sino también a toda la cadena de valor asociada.
El informe también revela que la producción de productos minerales no metálicos, esenciales para la construcción, cayó un 35,6% en junio. La baja en la elaboración de cemento y artículos de yeso refleja la crisis en el sector de la construcción, que continúa mostrando signos de contracción debido a la falta de inversiones y la incertidumbre económica.
Finalmente, la industria de productos de caucho y plástico experimentó una caída del 29,3% en junio, afectada por la menor demanda en sectores clave como la construcción, la industria automotriz y el empaque de alimentos y bebidas. Esta disminución es un indicador de la amplia desaceleración que atraviesa el sector manufacturero en su conjunto.