14 de mayo de 2025
PREOCUPACION
Productores y provincias insisten en frenar el levantamiento de la barrera sanitaria
En vísperas de una nueva reunión convocada por el Gobierno nacional, ruralistas de la Patagonia se movilizan para defender el estatus libre de fiebre aftosa sin vacunación. Neuquén y Río Negro insisten en extender esa condición al resto del país y denuncian un riesgo económico y sanitario

El Gobierno nacional convocó para este jueves 15 de mayo una nueva reunión con entidades rurales de las provincias ubicadas al sur del río Colorado, con el objetivo de avanzar en el debate por el futuro de la barrera sanitaria que protege a la región patagónica de la fiebre aftosa. El encuentro se realizará con el eje puesto en la Resolución 180/2025 del Senasa, que plantea la eliminación de la restricción al ingreso de carne con hueso plano desde el norte del país.
Será la segunda instancia de diálogo luego del encuentro celebrado en abril, aunque nuevamente sin la participación de La Pampa, provincia que también sería alcanzada por las eventuales modificaciones del esquema sanitario.
Desde el Gobierno nacional aseguran que la decisión de levantar la barrera “ya está tomada”, aunque en la reunión anterior Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) había indicado la voluntad de “avanzar en medidas consensuadas”.
En paralelo, este miércoles los principales referentes de las federaciones patagónicas se reunieron en la sede de la CRA para acordar una postura unificada. Enrique Jamieson, presidente de la Federación de Instituciones Agropecuarias de Santa Cruz (FIAS), remarcó que “no se puede ensuciar la Patagonia en este contexto internacional” y advirtió que el levantamiento de la barrera pondría en riesgo mercados clave para la carne ovina y bovina exportada desde la región.
El plazo de 90 días de suspensión de la Resolución 180/2025 vence el próximo 19 de junio. En ese marco, la reunión de este jueves podría ser determinante. Las provincias de Neuquén y Río Negro, junto a entidades rurales y expertos, rechazan la medida y proponen como alternativa elevar la barrera hacia el norte, incorporando a La Pampa y Buenos Aires, con el objetivo de extender el estatus de libre de aftosa sin vacunación a todo el país.
En la Legislatura de Neuquén, el debate también tomó fuerza. Funcionarios, veterinarios, académicos y productores coincidieron en que eliminar la barrera sería un retroceso sanitario y económico. Un informe de la Universidad Nacional del Comahue dio cuenta de que desde la creación de la barrera, la faena regional creció un 165%, aumentaron los mataderos habilitados y se consolidó una estructura de producción mayormente compuesta por pymes y familias rurales.
“Lo que está en juego es el esfuerzo de más de dos décadas y la permanencia en mercados internacionales que exigen condiciones sanitarias estrictas”, advirtió Cecilia de Larminat, presidenta de la Sociedad Rural de Neuquén.