16 de octubre de 2025
SANTA CRUZ
Rebeldía en la Corte: Basanta se negó a recibir la notificación de su suspensión en el TSJ
La Sala Acusadora de la Legislatura lo apartó del Tribunal Superior de Justicia por no cumplir con los años de ejercicio de la abogacía que exige la Constitución. El vocal, que percibirá medio sueldo, rechazó la notificación. La causa pasa ahora a la Sala Juzgadora, que definirá su destitución

En un nuevo capítulo de la crisis institucional que atraviesa el Poder Judicial de Santa Cruz, la Cámara de Diputados suspendió al vocal del Tribunal Superior de Justicia, Fernando Basanta, después de que se comprobara que no cumple con los seis años de ejercicio de la abogacía que exigen la Constitución Provincial y las leyes para ocupar dicho cargo. La medida, resuelta por la Sala Acusadora de la Legislatura, se tomó en el marco del juicio político que se le sigue y significa su apartamiento inmediato del máximo órgano judicial provincial.
La suspensión, que se hará efectiva con la percepción de la mitad de su sueldo, se produjo en una jornada signada por la tensión institucional. En ese sentido, Basanta se negó a recibir la notificación de la resolución, en un acto de rebeldía que refleja la profundidad del conflicto. El expediente continuará su curso en la Sala Juzgadora, donde los diputados que la integran deberán definir si corresponde la remoción definitiva del magistrado.
La decisión de la Sala Acusadora se basó en las pruebas presentadas por el abogado Sergio Macagno, que demostraron que Basanta recibió su título de abogado en septiembre de 2015, por lo que al momento de su designación como vocal del TSJ en 2022 no cumplía con el requisito constitucional de seis años de ejercicio profesional. Esta situación había sido cuestionada desde distintos sectores políticos y judiciales, pero recién ahora encontró resolución en el ámbito legislativo.
La suspensión de Basanta ocurre en el marco de una crisis institucional más amplia que afecta al Tribunal Superior, actualmente dividido entre los vocales que responden a la gestión del gobernador Claudio Vidal y aquellos que integraban la corte originalmente. De hecho, Basanta integra -junto a Reneé Fernández, Alicia Mercau y Paula Ludueña- el grupo de vocales que no reconocen la ampliación del tribunal y que mantienen una pulseada por la presidencia con Daniel Mariani y los vocales recién designados por la Legislatura.
El proceso de juicio político ahora pasa a su etapa definitiva en la Sala Juzgadora, donde se espera que los diputados analicen en profundidad los antecedentes y definan la situación laboral del magistrado. Mientras tanto, la suspensión de Basanta no sólo afecta la composición del Tribunal Superior, sino que altera los equilibrios internos en el máximo órgano judicial, en medio de una crisis que parece lejos de resolverse.