18 de diciembre de 2025
COMODORO RIVADAVIA
Chispazos entre oferentes: Patagonia Argentina se siente adjudicataria
Luego de la prórroga de 180 días de la licencia que caducó el 1 de diciembre en el Concejo Deliberante, la actual empresa que maneja el transporte público confía en que la volverán a elegir
Siguen las idas y vueltas en el municipio para elegir la empresa que se hará cargo del transporte público de pasajeros. Luego de que los trabajadores del rubro y usuarios del servicio hayan entrado en pánico por la finalización del contrato, se extendió de manera excepcional la adjudicación a Patagonia Argentina SRL.
Mientras se decide cuál será la empresa que será adjudicada, Jorge Moreno, titular de Patagonia Argentina SRL, se muestra confiado en que se finalizará el tiempo de prórroga con el Ejecutivo municipal otorgándoles el permiso de explotación.
Según Moreno, la oferta económica representa un ahorro significativo para el municipio. Asegura que la oferta por kilómetro es sensiblemente menor a la de su competidora, lo que implicaría una diferencia estimada en 3.600 millones de pesos anuales a favor de las finanzas públicas locales.
En declaraciones a medios locales, advirtió que la futura tarifa del boleto será incierta hasta que se definan los costos salariales e inflacionarios, y reafirmó la necesidad de subsidios para mantener la red operativa.
El debate por la prórroga no está exento de críticas. Sectores de la oposición y la empresa competidora objetaron la extensión del contrato, al sostener que podría afectar la transparencia del proceso licitatorio. Algunos concejales pidieron mayor claridad sobre los plazos y criterios que se utilizarán para la adjudicación definitiva del servicio.
A su vez, se realizó un estudio técnico no vinculante en el que se dictó que la oferta que resulta más conveniente y ajustada en todo su término a los requisitos exigidos por el pliego de bases y condiciones, es la firma del grupo MR S.R.L
Así, el sistema de transporte de Comodoro Rivadavia queda sostenido por una solución provisoria, mientras se desarrolla una licitación atravesada por tensiones políticas, cuestionamientos empresariales y expectativas económicas. La definición final será determinante no solo para el futuro del servicio, sino también para el impacto fiscal y la organización del transporte urbano en la ciudad durante los próximos años.